miércoles, 23 de abril de 2008

Me siguen llamando Burn

Las mujeres me dan la vida en esta ciudad, hay millares de mujeres de todas las clases, formas, colores, pero las que más me gustan son aquellas de mirada penetrante e inocente y con una sonrisa pícara.

En la discoteca que trabajo, pasan muchas mujeres a mi lado, me saludan, algunas me provocan, otras simplemente intentan persuadirme para que las deje pasar sin pagar y algunas se limitan a ignorarme por miedo a que las pida el D. N. I.

Dicen los que me conocen que tengo buen ojo a la hora de elegir con quien compartir mi tiempo libre, pero no estoy muy de acuerdo. Ya que siempre me suele salir el tiro por la culata.

No soy una persona muy constante en casi nada relacionado con las relaciones sociales, tampoco es que desee mantener relacionas duraderas con el sexo opuesto. Entre mi trabajo , los estudios y demás no tengo muchas ganas de tener la cabeza ocupada con más cosas.

Pero a veces, lo necesito. Necesito escapar de mis tareas diarias y entonces allí están ellas...Lindas, hermosas, que esperan que este portero de discoteca las sorprenda de alguna manera.

Me llaman Burn, por que ando casi siempre quemado, marchito, quejándome de aquello que me preocupa. Pero hoy, he decidido que debo de cambiar esta parte de mí, darme una oportunidad y seguir... Seguir... Y dar un giro de 360º, para ya no volver a decir que ando perdido en esta ciudad sin límites, en este centro neurálgico de un país lleno de alegría, fiesta, color y sol. Mucho Sol.

2 comentarios:

María (luna) dijo...

Creo que deberíamos moderar más los comentarios, prefiero ninguno...A las barbaridades que meo por ahí y he de borrar.

Aunque con eso de que luego descubro los datos, parece que la cosa se ha calmado.

María (luna) dijo...

meo=leo